15 de septiembre de 2009

Valores de la sustentabilidad

Durante cierto tiempo, y aún hoy en día en ciertos ámbitos, se ha pretendido separar la crisis ambiental de la crisis social, pero la crisis social es otro efecto del mismo modelo de desarrollo. La crisis ambiental y la crisis social se alimentan mutuamente; por lo tanto, se resuelven en conjunto o por separado se seguirán agudizando.
Con un mínimo de honestidad intelectual, no se puede ignorar que tenemos, por un lado, un capitalismo pirata y depredador y, por el otro lado, formas de inversión con responsabilidad social y ambiental. Incluso en sectores críticos, como la hotelería, la industria automotriz, las mayores empresas están buscando adaptarse a normas de sustentabilidad.
La sustentabilidad no es un eufemismo de moda ni moneda de cambio. No es un recurso de propaganda “Marketing verde” para lavarse la cara y seguir la vida como siempre. El desarrollo sustentable es un principio duro, difícil, pero ineludible, con cuatro dimensiones:

• La dimensión ecológica implica preservar y potenciar la diversidad y complejidad de los ecosistemas, su productividad, ciclos naturales y biodiversidad, para garantizar la sobrevivencia física y cultural de las comunidades, sobre todo de las más pobres.

• La dimensión social consiste en reconocer el derecho a un acceso equitativo a los bienes ambientales para todos los seres humanos, en términos intrageneracionales e intergeneracionales, tanto entre géneros como entre culturas.

• La dimensión económica busca definir las nuevas actividades económicas a partir de unidades de producción locales y diversificadas, adaptadas a las características de los ecosistemas involucrados, para usarlos de manera sustentable.

• La dimensión política requiere la participación directa de las personas en la toma de decisiones del desarrollo, en la definición de su futuro y en la gestión de los bienes ambientales a través de formas de gobierno descentralizadas y democráticas.

Hoy por hoy, el desarrollo sustentable es una aspiración y un proceso en gestación.

El único camino es convocar a todos los actores empresas, comunidades locales y gobiernos locales, regionales y nacionales a que atiendan las condiciones particulares de cada lugar y se ajusten sobre la marcha y dar comienzo al proceso de información, de discusión, de búsqueda de soluciones y de acuerdos.

Hay que generar nuevas prácticas basadas en la participación directa y protagónica de las personas en la búsqueda de alternativas, que deben surgir de relaciones horizontales, ajenas a formas centralizadas y verticales de ejercicio del poder.

La sustentabilidad sólo es posible si el pueblo "yo, tu y todos nosotros" somos conscientes y ejercemos nuestro poder de decisión en cada uno de nuestras áreas de influencia.
La sustentabilidad no es sólo tarea del gobierno, es tarea de cada uno de nosotros.

Viva México- Reflexión de un francés

Alguien comenzó una cadena en internet promoviendo la idea de no dar el grito este 16 de Septiembre como protesta ante el gobierno, por la inseguridad en que vive el país y específicamente el primer lugar que ibtuvo México en secuestros a nivel mundial.
Aquí les dejo la respuesta de un franchute (frances Mexicanizado), la verdad vale la pena leerla!:

"Querido amigo.
No es mi intención herirte pero me gustaría comentar algo respecto a tu reflexión: los pueblos tienen los gobiernos que merecen (Este dicho no es mío).

No es responsabilidad ni capacidad de un gobierno cambiar la sociedad. Esto le corresponde a la sociedad misma.

México carga grandes paradigmas.

¡Imagínate! ¿Cómo en un país tan “religioso”, “católico” se mata, se decapita, se secuestra, se roba se miente, se corrompe, se desprecia uno tanto?

Y cuando parece que todo el mundo se queja de esta inseguridad, la misma gente reconoce y elogia a sus queridos narcos a través de modas como la canción popular de la “filarmónica banda”?

El cambiar la sociedad empieza por uno mismo, por ser impecable, por reflejar el buen ejemplo, por respetarse y amarse a sí mismo y contagiar al vecino.

El que sea que el pueblo haya elegido para liderar sus instituciones merece apoyo antes de crítica, independiente de que si o no sea justo que haya sido elegido por una minoridad (ya que el sistema electoral mexicano solo considerá una sola ronda de elecciones, el ganador, salvo escasos ejemplos siempre habrá sido electo por menos del 50% de los electores. Esto NO es democracia en mi humilde opinión).

En la historia del mundo todos los gobiernos exitosos son los que habrán sido respaldados fuertemente por la población. Mientras sigamos evadiendo impuestos, cerrando los ojos ante la piratería, mochándonos con mordidas, engañando a otros, no esperes milagros amigo.

El milagro eres tú, si lo quieres.

Yo, solo soy un Franchute que este país ha adoptado y que se ha dejado conquistar por él. Sigo creyendo en el, en su belleza, su riqueza y su gente y, aunque tu oración encuentre audiencia y que México se quede callado este 15 de Septiembre, por ahí habrá un Franchute gritando “VIVA MÉXICO”! ¡VIVA!"

Por Laurent Houdebine